Las medias verdades del colesterol: lo que divide a los científicos y confunde a los ciudadanos

A finales de la década de los setenta, comenzaron a propagarse erróneamente las ideas de que el aceite de girasol era mucho más apropiado que el de oliva para prevenir trastornos cardiovasculares. Desde entonces, han surgido nuevos datos científicos que sugieren que las grasas fueron condenadas al purgatorio sin haber tenido un juicio justo, máxime después de conocerse que algunas empresas norteamericanas relacionadas con la industria azucarera habían financiado estudios científicos para poner el foco de atención sobre ellas, y así desviarlo de los dulces y las bebidas azucaradas. En los últimos años, un grupo de investigadores ha comenzado a cuestionar el conocimiento científico existente sobre el colesterol y las estatinas (uno de los grupos de fármacos que ayudan a reducirlo). Todo esto nos lleva a hacernos las siguientes preguntas: ¿Funcionan las estatinas? ¿Puedo comer todos los huevos que quiera? ¿Quiénes son los ‘negacionistas’ del colesterol?