El tratamiento con estatinas reduce el riesgo de pancreatitis
Aunque algunos estudios han sugerido que el uso de terapias hipolipemiantes puede aumentar el riesgo de pancreatitis, un nuevo análisis, que incluyó datos de estudios anteriores, y a más de 150.000 participantes, muestra que el tratamiento con estatinas reduce el riesgo de pancreatitis, en pacientes con niveles normales, o elevados moderadamente, de triglicéridos. La investigación ha sido publicada en JAMA.
David Preiss, de la Universidad de Glasgow, en el Reino Unido, y sus colaboradores, examinaron la asociación entre el uso de estatinas o fibratos, y la incidencia de pancreatitis, mediante la realización de un meta-análisis de los datos publicados, y no publicados, de ensayos clínicos aleatorios de gran tamaño.
En 16 ensayos sobre las estaninas controlados con placebo, con 113.800 participantes, realizados durante 4,1 años, 309 participantes (un 0,27 por ciento) desarrollaron pancreatitis (de éstos, 134 tomaban estatinas, y 175 pertenecían al grupo control). En otros 5 ensayos de comparación de diferentes dosis de estatinas, con 39.614 participantes, realizados durante 4,8 años, 156 participantes (un 0,39 por ciento) desarrollaron pancreatitis (de éstos, 70 tomaban una dosis intensiva, y 86 una dosis moderada).
Mejor que los fibratos
En el conjunto de datos combinados de 21 ensayos, 465 participantes (un 0,30 por ciento) desarrollaron pancreatitis (de los cuales 204 fueron asignados a tratamiento con estatinas, o a una terapia intensiva de dosis de estatinas, y 261 fueron asignados a placebo, atención estándar, o a dosis moderadas de estatinas).
Por otro lado, en 7 ensayos clínicos aleatorios de tratamiento con fibratos, que proporcionaron datos sobre 40.162 participantes durante un promedio de 5,3 años, 144 participantes (un 0,36 por ciento) desarrollaron pancreatitis (84 asignados a la terapia con fibratos, y 60 asignados a placebo), aunque la diferencia de riesgo no fue estadísticamente significativa.
Los autores concluyen que este nuevo análisis plantea cuestiones relativas a la elección de agentes modificadores de lípidos, en pacientes con hipertrigliceridemia. En aquellos con niveles de triglicéridos ligeramente elevados, las estatinas parecen ser mejores que los fibratos en la prevención de la pancreatitis, aunque las modificaciones en el estilo de vida también siguen siendo importantes para mejorar los perfiles de lípidos en estas personas